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La acupuntura para el sistema inmunológico

zangfu

Los órganos de la Medicina Tradicional, que incluyen los pulmones, el bazo, los riñones, el hígado y el corazón (también denominados como los cinco órganos sólidos) están en el centro de las actividades inmunes. 

Se combinan con los tejidos, las vísceras (órganos), los meridianos, el qi (energía vital), la sangre y los fluidos corporales, y forman una unidad

A diferencia de la medicina occidental, sus significados fisiológicos y patológicos no son del todo iguales. Más que una estructura anatómica única, un órgano (zang) es parte del proceso energético dinámico general del cuerpo. 

La energía saludable está estrechamente relacionada con sus actividades fisiológicas. Son el centro de todo el proceso inmunológico. Sus trabajos colaborativos son actuar como mensajeros, ser responsables del transporte y almacenamiento, lidiar con excesos y desperdicios, controlar la comunicación interna, tomar decisiones y activar funciones corporales.

Una unidad en movimiento sincronizado con la naturaleza

En la medicina tradicional china, la energía saludable (zheng qi) se refiere a la resistencia natural del cuerpo contra las enfermedades y su capacidad de reparación, que está estrechamente asociada con las actividades fisiológicas de los cinco órganos zang.

Los detalles de los órganos y su relación con nuestro sistema inmunológico se describen a continuación:

Los pulmones son una barrera inmunitaria.

Los pulmones presiden el qi (energía vital). Se conectan externamente con la piel y el cabello y diseminan el qi protector sobre la superficie del cuerpo y forma la primera barrera contra la invasión de patógenos exógenos. 

El bazo promueve las funciones inmunológicas.

En fisiología occidental, el bazo es un órgano linfático vascular de gran tamaño. Sin embargo, en la medicina tradicional china, el bazo se considera el «fundamento adquirido de la vida», la fuente de producción de sangre y qi (energía vital). En realidad, el bazo es una unidad multifuncional, que cubre las funciones del páncreas y el bazo anatómico occidental y promueve las actividades de los sistemas digestivo, endocrino, nervioso y sanguíneo.

Por lo tanto, el bazo determina la abundancia y el agotamiento de la energía saludable. A su vez, asegura la protección corporal frente a enfermedades.

Los riñones son la base de las funciones inmunológicas.

La medicina tradicional china considera a los riñones como la «base congénita de la vida», la raíz de la energía saludable. Rige la constitución congénita y la prosperidad de la energía saludable. La esencia del riñón almacenada (jing) es la base material de las fuerzas yin y yang de todo el cuerpo, que hacen que la forma física y las funciones del cuerpo se restrinjan mutuamente y dependan unas de otras. Por tanto, los riñones juegan un papel importante en la salvaguardia del equilibrio interno. Además, la abundancia de esencia de riñón (jing) promueve la vitalidad y el funcionamiento del qi protector, fortaleciendo así la resistencia del cuerpo.

Trabajan en estrecha colaboración con la red de regulación inmunológica neural-endocrina.

El hígado ayuda a mantener la actividad inmunológica normal.

El hígado es responsable de parte de las funciones de los sistemas endocrino, digestivo, circulatorio e inmunológico. El hígado promueve movimientos fluidos y extendidos. Al estimular el flujo, el hígado ajusta y asegura el movimiento suave del qi, la sangre y los fluidos corporales, y esparce estas sustancias por todo el cuerpo. La actividad emocional es una manifestación externa del estado fisiológico del sistema de órganos internos, que se considera la principal causa interna de enfermedades (consideradas como males endógenos en condiciones extremas). La salud emocional normal depende de la armonía del qi y el flujo sanguíneo, y el hígado se encarga principalmente de este aspecto. Cuando el hígado mantiene todo fluyendo sin problemas, se crea un ambiente interno regulado que mantiene alejadas las enfermedades.

El corazón regula las actividades inmunológicas.

El corazón controla y regula el flujo de sangre a través de los vasos del cuerpo. También gobierna el espíritu, que en la medicina tradicional china, es el administrador principal de todas las actividades fisiológicas y mentales. Normalmente, el corazón ejerce su influencia sobre otros órganos a través del fuego monarca (fuego del corazón) que coopera con el fuego del primer ministro para promover las actividades funcionales de otros órganos. Cuando el «gobierno» del corazón es bueno, los otros sistemas de órganos funcionan en armonía y el cuerpo puede luchar eficazmente contra las enfermedades.

Además de bombear sangre, el corazón posee nuestra comprensión occidental del papel del cerebro en la regulación de las funciones nerviosas, cardiovasculares y endocrinas, porque el corazón alberga el espíritu (shen). Dado que el corazón juega un papel en la regulación de las funciones nerviosas y endocrinas, naturalmente también juega un papel en la regulación inmunológica.

Además, los meridianos son las vías del qi y la circulación sanguínea, así como los canales donde actúan las funciones inmunes. El triple recalentador dirige los diversos tipos de qi y actúan como estaciones de canal para que circulen los fluidos corporales. Tienen un efecto importante sobre las actividades inmunológicas.

Pedro González – centretui.com

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